Arratsalde on,

Aquí os envio mi experiencia:

Desde siempre había querido ayudar a la gente pero nunca parecía encontrar el tiempo. Ahora estaba en desempleo y le estaba dando vueltas a la posibilidad de colaborar, cuando la pandemia del Covid-19 estalló y tuve claro que algo tenía que hacer. He sido muy afortunado de haber convivido mucho con mis mayores, que vivieron tiempos mucho más duros y siempre admiré su capacidad de sufrimiento, su optimismo como relativizar lo que no es importante. Y este virus es especialmente cruel con ellos, por lo que poder ayudar a estas personas que viven solas es perfecto para mí.

Espero sinceramente que esta crisis nos haga ver las injusticias y las diferencias que existen en la sociedad. Que todos estos aplausos y gestos de solidaridad se conviertan en parte de nuestras vidas, de nuestro modo de ver la realidad. Tengo dos hijos preadolescentes y espero que lo que yo haga les sirva de ejemplo para ser más generosos, más abiertos a otra gente y que no den su bienestar por hecho. Y que sirva para darse cuenta de que el ser humano es insignificante ante un virus o ante la naturaleza, y que tomen conciencia de que tenemos que cuidar de los demás y del planeta.

Lo que más me gusta de mi labor es poder charlar con las personas que se encuentran solas, creo que es la labor más necesaria y la más bonita.

Arkaitz Errasti Chinchurreta
Spanish Red Cross
April 6, 2020